Reflexión:
Lo lamentable e increible de todo esto es que empresas con cierto prestigio, con una trayectoria de seriedad y de respeto por sus clientes como es el caso de Cortefiel, contrate a empresas como Affinion Internacional, para lo que sea, sin tener en cuenta que realiza la captación de clientes y, en su caso, cargos regulares en sus cuentas corrientes de forma torticera, utilizando variadas y sofisticadas formas de engaño.
Al día de hoy, sigo sin entender por qué Cortefiel no ha tomado medias aun, a pesar de las quejas recibidas y sigo sin entender como empresas como Affinion Internacional siguen existiendo, señal de que reciben ingresos que los mantiene y, a saber la cuantía. Tal vez los ingresos les permiten cierto nivel de prosperidad que en general la sociedad no tiene.
Y dicho esto, no me extraña. Cunde el ejemplo. No hay más que echar un vistazo y valorar el alto nivel de corrupción de la clase política en general para entender que la tolerancia hacia los corruptos, la aplicación desigual de la Ley (caso de la Infanta), etc., es aprovechada por este tipo de empresas que siguiendo comportamientos similares a la de los políticos, familias reales, etc., se ven favorecidas por ese clima de tolerancia, por esa aplicación desigual de la Ley.
Al final, perdemos los de siempre y tambien ganan los de siempre.
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